Abby Johnson entró como becaria en Planned Parenthood, la conocida multinacional del aborto. Quería ayudar a las mujeres que se enfrentan a situaciones de crisis, y pensaba que esa organización tenía sus mismos objetivos. A los pocos años, Abby era directora de uno de sus centros, donde empezó a comprobar que en realidad se trataba de un buen negocio. Su confusión se aclaró definitivamente cuando atendió un aborto por ecografía. Entonces se le abrieron los ojos a la gran mentira de la que había formado parte durante esos años.
Sin Planificar es un libro dramático y conmovedor, inteligente y honesto, muy bien escrito. Creo que aportará mucho a lectores universitarios, quizá más a lectoras, por empatía con una autora que narra su azarosa vida desde su ingreso en una Universidad de Texas.