Malvivimos en un mundo bastante friki, complicado artificialmente por cachivaches de última generación, en medio de una selva que puede poner a prueba los nervios del más templado, sobre todo si el susodicho vive o trabaja en un edificio inteligente. Por fortuna, Itxu Díaz, periodista y gallego, acumula en Yo maté a un gurú de Internet sabios consejos para sobrevivir en esa jungla surrealista.
Itxu nos habla, con humor ingenioso, sobre la informatizada intrascendencia de nuestras vidas, pero su libro no tiene nada de intrascendente, pues denuncia las nuevas cadenas de los nuevos esclavos. Y consigue que leamos sus 222 páginas con una sonrisa constante y frecuentes carcajadas.